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Si eres amante del café y te encanta disfrutar de bebidas refrescantes en los días calurosos, el café granizado es la opción perfecta para ti. Esta deliciosa bebida combina la intensidad del café con la frescura de los hielos, creando una experiencia única para tu paladar. En este artículo, te enseñaremos cómo hacer café granizado en simples pasos, para que puedas disfrutarlo en la comodidad de tu hogar. ¡No te lo pierdas!

Preparar un café cargado

El primer paso para hacer café granizado es preparar un café cargado y concentrado. Para ello, necesitarás café molido y agua caliente. Puedes utilizar una cafetera tradicional o una máquina de espresso para obtener un café de calidad. Asegúrate de utilizar una cantidad adecuada de café para obtener un sabor intenso y delicioso.

Una vez que hayas preparado el café, déjalo reposar unos minutos para que se enfríe un poco antes de utilizarlo en la receta del café granizado.

Calentar agua y añadir azúcar para hacer un jarabe

El siguiente paso es calentar agua en un cazo y añadir azúcar para hacer un jarabe. Utiliza aproximadamente 100 ml de agua y 3 cucharadas de azúcar. Remueve constantemente hasta que el azúcar se disuelva por completo y obtengas un jarabe clarito.

El jarabe de azúcar le dará un toque dulce al café granizado y ayudará a que los hielos se mezclen de manera uniforme. Si prefieres un café granizado menos dulce, puedes reducir la cantidad de azúcar según tu gusto.

Agregar el café al jarabe

Una vez que hayas obtenido el jarabe de azúcar, retira el cazo del fuego y añade el café preparado. Mezcla bien para que el café se integre con el jarabe y obtengas una mezcla homogénea.

Recuerda que el café debe estar a temperatura ambiente o ligeramente frío antes de añadirlo al jarabe. De esta manera, evitarás que el jarabe se caliente demasiado y altere el sabor del café.

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Opcionalmente, añadir canela

Si te gusta el sabor de la canela, puedes añadir media cucharada de canela en polvo a la mezcla de café y jarabe. La canela le dará un toque aromático y especiado al café granizado, realzando aún más su sabor.

Si no eres fanático de la canela, puedes omitir este paso y disfrutar de un café granizado sin este ingrediente adicional.

Mezclar y verter en un tupper

Una vez que hayas añadido la canela (si así lo deseas), mezcla todos los ingredientes nuevamente para asegurarte de que estén bien integrados. Luego, vierte la mezcla en un tupper o recipiente apto para congelar.

Es importante utilizar un recipiente con tapa para evitar que se formen cristales de hielo en la superficie del café granizado mientras se congela.

Congelar durante 30 minutos

Coloca el tupper en el congelador y déjalo durante aproximadamente 30 minutos. Durante este tiempo, el café comenzará a congelarse y adquirirá una textura más sólida.

Es importante no dejar el café granizado en el congelador por mucho tiempo, ya que podría congelarse por completo y perder su textura granulada característica.

Romper los cristales de hielo con un tenedor

Transcurridos los 30 minutos, retira el tupper del congelador y utiliza un tenedor para romper los cristales de hielo que se hayan formado. Este paso es fundamental para obtener la textura granulada y refrescante del café granizado.

Asegúrate de romper los cristales de hielo de manera uniforme, evitando que se formen grandes bloques de hielo en la mezcla.

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Repetir el proceso cada 30 minutos hasta obtener la textura deseada

Una vez que hayas roto los cristales de hielo, vuelve a colocar el tupper en el congelador y repite este proceso cada 30 minutos hasta obtener la textura deseada. Esto significa que deberás sacar el tupper del congelador, romper los cristales de hielo con un tenedor y volver a congelar durante otros 30 minutos.

La cantidad de veces que debas repetir este proceso dependerá de la textura que desees obtener. Si prefieres un café granizado más suave, puedes repetir el proceso unas 2 o 3 veces. Si, por el contrario, prefieres una textura más granulada y refrescante, puedes repetir el proceso más veces.

Servir en copas o vasos

Una vez que hayas obtenido la textura deseada, retira el tupper del congelador y sirve el café granizado en copas o vasos. Puedes utilizar copas altas para darle un toque más elegante o vasos anchos para una presentación más informal.

Recuerda que el café granizado se derrite rápidamente, por lo que es recomendable servirlo inmediatamente después de sacarlo del congelador.

Opcionalmente, añadir nata montada o helado de vainilla

Si quieres darle un toque aún más especial a tu café granizado, puedes añadir nata montada o una bola de helado de vainilla en la parte superior. Estos ingredientes le darán cremosidad y un sabor extra delicioso a tu café granizado.

Simplemente coloca una cucharada de nata montada o una bola de helado de vainilla en la parte superior de cada copa o vaso de café granizado y disfruta de esta deliciosa combinación de sabores.

Decorar con granos de café

Para darle un toque final de decoración, puedes añadir algunos granos de café en la parte superior de cada copa o vaso de café granizado. Estos granos de café no solo le darán un aspecto más llamativo, sino que también aportarán un aroma adicional a tu bebida.

Recuerda que los granos de café son comestibles, por lo que puedes disfrutar de ellos junto con tu café granizado.

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¡Y eso es todo! Ahora que conoces todos los pasos para hacer café granizado, puedes disfrutar de esta refrescante bebida en cualquier momento. Sorprende a tus amigos y familiares con esta deliciosa receta y disfruta de un café granizado casero y lleno de sabor. ¡No te arrepentirás!